lunes, 25 de mayo de 2009

Una nueva crisis del capital

A pesar de la dramática situación que genera, la crisis capitalista resulta un tema definitivamente apasionante. A su vez, su análisis es insoslayable desde cualquier perspectiva, lo que lo convierte en un tema de debate que pone a prueba la validez de las distintas teorías al respecto. Sólo que no se trata de un mero ejercicio teórico, sino que, al poner a prueba la fundamentación teórica, desde las distintas corrientes de pensamiento, a su vez cada sujeto evidencia al lado de qué clase social se coloca, qué intereses asume. 

De allí que no es de extrañar que quienes vienen asumiendo la defensa de la llamada política neoliberal tengan la desfachatez de defender sus tesis, muy a pesar de que una de las evidencias de la profundización de esta crisis ha sido la laxitud que ha gozado el capital para especular, para hacerse de espacios de la economía y de los fondos sociales para jugar en la ruleta de las bolsas, pero, en esta oportunidad, como cuando se juega a la ruleta, a momentos se pierde, sólo que quienes sufren las consecuencias de la pérdida no son los capitalistas, especuladores o industriales, sino los trabajadores.